Presos Políticos ¡Libertad!

• Se inició plantón en el zócalo para exigir la libertad de los 15 campesinos de Azumiatla injustamente detenidos
• Representantes de las organizaciones del Frente de Organizaciones Sociales Sindicales y Campesinas (FOSSCEP) expresaron sus demandas
• Según Pepe Momoxpan, el ex magistrado Guillermo Pacheco Pulido, es poseedor de más de 800 hectáreas en esa zona
Federico Chilián Orduña
Tal como se anunció con anterioridad, a partir de ayer se inició el plantón que por tiempo indefinido quedará instalado en el zócalo de esta ciudad, para exigir al gobierno de Mario Marín Torres, cese la represión y ponga en libertad de inmediato a los 15 campesinos originarios de la Junta Auxiliar de San Andrés Azumiatla, que fueron golpeados, torturados y detenidos desde hace tres meses por cometer el “delito” de defender su patrimonio.
Entre los diversos oradores que hicieron patente esta petición, hice lo propio fustigando al gobierno de Mario Marín y a su secretario de gobernación Mario Montero, por su insensibilidad e incapacidad para atender un asunto de urgente resolución. Condené la soberbia que ha caracterizado a este gobierno y recordé el hecho de que desde el caso de Lidia Cacho se ha hecho evidente: que este gobierno está al servicio de los grandes capitalistas en perjuicio del pueblo trabajador. Recordé el pésimo ejemplo que nos dejó el diálogo que sostuvo Marín con Kamel Nacif, a quien llamó “mi héroe chingao” y lamenté que estemos en manos de un personaje que olvidó los ideales que tratamos de inculcarles a los alumnos de la Escuela Preparatoria Popular “Emiliano Zapata”, donde el gobernador cursó su bachillerato, gracias al esfuerzo de los universitarios por garantizarles educación a los jóvenes que como él actual gobernador, no tuvieron acceso en la Preparatoria “Benito Juárez”.
Lamenté que mi amigo el exmagistrado Guillermo Pacheco Pulido, actuando de manera contraria al ejemplo que nos legó su padre don Macario Pacheco Altamirano, comparta intereses, actitudes y sentimientos con un gobierno que no comprende las necesidades del pueblo campesino.
Pedí en el altoparlante a la alcadesa Blanca Alcalá Ruiz con quien sostengo una relación de mutuo respeto que intervenga para que no haya presos políticos en el municipio a su cargo.
Hice una arenga sobre lo que significa en la historia de México el legado de nuestros héroes, Hidalgo, Morelos, Juárez y Zapata, a quienes todo indica han olvidado nuestros gobernantes.
Antes y después de mi turno, continuaron los oradores, cuyos nombres no menciono para no exponerlos a la persecución de las autoridades.
De mi parte no es protagonismo, es compromiso con la comunidad que votó por mi en 1988 cuando fui candidato a diputado federal por el Frente Democrático Nacional; la misma que en 1997 me permitió ganar la elección interna del PRD a Jorge Méndez Spínola, para ser el candidato de este partido, ganándole la contienda a quien fungía como “dirigente” del partido y lo tenía al servicio del gobierno de Mariano Piña Olaya.
Refrendé mi compromiso que desde hace más de cuarenta años hice explícito en mi primer libro y en la UAP de dedicar mi vida para servir al pueblo; lo cual no es demagogia ni es postura venal.
Expresé mi opinión de que me parece un desperdicio dedicar la vida a acumular dinero, y una traición de los gobernantes lucrar con los recursos públicos. Sólo eso.