30 de julio de 2007

El PT a disposición de la derecha

Ante la derrota de Hinojosa en el PAS el diputado petista Mariano Hernández ofrece el registro de su partido, al representante y primo de Felipe Calderón
El aspirante y el dirigente partidista hacen a un lado los principios y la ideología

Luciano Rodríguez Meza

Luego de perder Gabriel Hinojosa Rivero la candidatura a la presidencia municipal de Puebla en el Partido Alternativa Socialdemócrata, ante la llegada triunfal de Federico Chilián Orduña; el dirigente estatal del Partido del Trabajo, el diputado Mariano Hernández Reyes, se apresuró a ofrecerle al damnificado el registro de su partido para que contienda con las siglas del PT.
Resulta extraño que un partido que en sus documentos básicos sostiene una ideología marxista leninista maoísta, que prepara a sus cuadros dirigentes en el conocimiento de la línea de masas trazada por el dirigente de la revolución china Mao Tse Tung, que supuestamente forma parte del Frente Amplio Progresista que junto con el Partido de la Revolución Democrática y Convergencia, sostienen como “presidente legítimo” a Andrés Manuel López Obrador, se apresure a ofrecerle el registro del partido a un ciudadano que fue “Encargado en Puebla de los Amigos de Fox” en 1999 y 2000, y coordinó la formación de “Ciudadanos con Calderón” en 2006 (véase su currículum vitae en su página de Internet G2G); igualmente resulta contradictorio que un ex presidente municipal que le dio impulso a la colocación de nombres de clérigos católicos a las calles de la ciudad (Juan de Palafox y Mendoza, Juan Pablo II, etc.), con tal de lograr sus objetivos políticos, acepte figurar como abanderado de un partido que, ideológicamente, es totalmente contrario a sus creencias.
Aunque analizando el pasado reciente del Partido del Trabajo, que postuló a la ultraderechista Ana Rosa Payán en las pasadas elecciones de Yucatán, no resulta tan descabellada la posibilidad.
Seguramente, tanto el candidato GHR como el dirigente del PT, son de los que creen que en política, como en la guerra y el amor, todo se vale.