19 de junio de 2007

Trauma social ocasiona la SCJN

Cualquiera que sea su decisión la inconformidad será mayor que la aceptación
La clase política en el poder ya está haciendo maletas para pelarse

Federico Chilián Orduña

El daño que provocó el marido de la señora Martha Sahagún al pueblo de México, me refiero al sujeto que compró su título como licenciado en relaciones industriales egresado de la Universidad Iberoamericana siendo candidato del PAN a la presidencia de México, el oligofrénico Vicente Fox Quesada, el mismo que por capricho de Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, la Iglesia Católica Apostólica Romana y el imperio norteamericano en manos del cocainómano George W.C. Bush, se encaramó en la presidencia de la República, aún no terminamos de asimilar.
Es muy probable que en dos o tres generaciones todavía no salgamos del desbarajuste que nos heredó ese ranchero abusivo e imbécil que lesionó gravemente la economía, la política, la ideología y todo lo que había construido el pueblo de México a lo largo de dos centurias, este pendejo en menos de 6 años lo convirtió en materia FECAL, colocando al señor FECAL (Felipe Calderón) como sucesor para continuar su obra de destrucción de lo mejor que han hecho los mexicanos, pese a la nefasta presencia del Vaticano y las potencias imperialistas en este suelo.
Este sujeto (VFQ) que, si el pueblo de México se levantara en armas, sería el primero en ir al paredón, cree en su cabecita loca, después de que durante su sexenio salió un mexicano cada minuto de este país para buscar mejor suerte en territorio estadounidense, que todavía tiene tareas por cumplir, como salvar al pueblo de Venezuela y a toda Latinoamérica que ha decidido mandar al demonio al imperio norteamericano, e incluso proteger a su heredero el pelele FECAL aunque sea rodeado todo el tiempo de un dispositivo militar que ni Porfirio Díaz utilizó en sus momentos de mayor desprestigio e inseguridad.
Todo lo anterior viene a cuento porque cualquiera que sea la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en torno al caso Marín Cacho, nadie va a creer que se apegaron a derecho, lo mismo si lo absuelven que si lo condenan, de todos modos, quedara el “sospechosismo” como diría el otro estúpido que responde al nombre de Santiago Creel Miranda, que actualmente cobra como senador y que votó a favor de la ley televisa, el mismo que como secretario de gobernación autorizó que México se convirtiera en un inmenso garito y prostíbulo al servicio de los gringos; que todo fue resultado de una concertacesión entre el PRI y el PAN, que son los partidos que se reparten el 90% del pastel de la partidocracia que padecemos.
Lo que han provocado la alianza entre Carlos Salinas de Gortari y Diego Fernández de Cevallos desde 1988 hasta la fecha es que México se haya convertido en un simple botín al alcance de los delincuentes de cuello blanco, carentes de escrúpulos, de sentimientos patrios, de visión histórica y sobre todo de madre, que se ostentan como políticos profesionales del PRI o del PAN.
El punto más álgido de esta alianza ocurrió cuando ambos partidos, PRI y PAN, decidieron darle carpetazo al asunto de los “amigos de Fox”, a cambio del “PEMEXgate”, con lo cual una banda de delincuentes gobierna este país desde el 2003 a la fecha.
En estas condiciones, es fácil predecir que quienes se vieron beneficiados con la alianza Salinas Diego, PRI-PAN, ya preparan la graciosa huida, antes de que el país se incendie, lo cual no va a suceder porque el movimiento que encabeza el presidente legítimo Andrés Manuel López Obrador, está actuando con la suficiente responsabilidad como para cambiar la situación sin derramar una gota de sangre.
Lo único que han venido a causar Fox y FECAL en este país, es un severo trauma en la sociedad mexicana, que muy difícilmente va a superar.
Nadie les va a agradecer que se quede o se vaya Mario Marín y sus colaboradores. Ellos, Vicente Fox Quesada y Felipe de Jesús Calderón e Hinojosa, hicieron mierda la justicia en México.