13 de septiembre de 2006

Negligencia médica en el ISSSTEP

Un simple caso de vómito y dolor en la ingle se complicó al grado de que el paciente podría quedar discapacitado el resto de su vida

Federico Chilián Orduña

Parece increíble que una molestia relativamente simple como es el vómito y dolor en la ingle llegue a complicarse al extremo de que el paciente tenga que ser intervenido quirúrgicamente en la base del cráneo, sufra una fractura en el hombro y pierda la noción de sí mismo y lo que le rodea, todo por la pésima atención recibida en el ISSSTEP, de parte de algunos médicos y paramédicos, quienes con sobrada irresponsabilidad están a punto de dejar en el mayor desamparo a una madre de familia y a sus tres hijos de 5, 6 y 13 años de edad, debido a que su padre, es el paciente que ha sido víctima de esta negligencia médica.
Sucedió que Juan Manuel González Nava ingresó al área de urgencias del hospital central del ISSSTEP por los síntomas señalados al principio. Los primeros médicos que lo atendieron presumían que se trataba de una apendicitis, le administraron un medicamento de nombre OMEPRASOL y lo dieron de alta tan pronto como notaron una aparente recuperación.
Sin embargo tan pronto como llegó a su domicilio, de nueva cuenta se le presentaron las molestias por lo que la infortunada esposa Ana Mavi Méndez López, recurrió a un médico particular quien si dudarlo recomendó que fuera internado otra vez y de inmediato porque presentaba una deshidratación severa. Procedió la señora a cumplir las indicaciones médicas y ya en el sanatorio recibió malos tratos de parte del personal encargado de urgencias, le pidieron que se retirara, sentaron al paciente en una silla, y así pasaron las horas, mientras se debilitaba aún más el paciente. El caso es que cuando intentó levantarse de su asiento el enfermo cayó y se golpeó en el hombro y en la cabeza, de lo cual se enteró la esposa mucho después porque no le permitían estar cerca de su esposo. La historia es larga de contar. Del asunto ya tienen conocimiento las autoridades competentes, debido a la justificada demanda que levantó la agraviada en el Ministerio Público, con el número 2646/06/sur; asimismo están enteradas las autoridades del ISSSTEP y la sección 51 del SNTE al que pertenece el enfermo. También el periódico Síntesis ha notificado algo al respecto, pero hasta el momento, para el paciente internado en la cama 114 del nosocomio del ISSSTEP, la situación es más que preocupante. ¿Qué va a suceder? Por lo pronto el día 26 están citados los demandantes para presentar testigos y después… sólo Dios sabe qué pueda suceder.
Claro, el paciente es un modesto trabajador de apoyo técnico en el sector educativo; todos los días tendría que viajar al municipio de Esperanza para realizar sus labores. Pero ahora la ironía ¿hay alguna esperanza?