7 de junio de 2007

Homenaje a Fernando Ramírez Osorio

5ª de 5 partes
El maestro Pintor, Escultor, Grabador y Muralista, recibió justo homenaje de periodistas y ciudadanos
Tal como se anunció a lo largo de la semana, el maestro Fernando Ramírez Osorio, fue objeto de un homenaje por parte del Grupo de Periodistas de Puebla, en la tradicional ceremonia efectuada en la Plaza de la Libre Expresión.
Luego de la intervención del decano de la prensa en Puebla, don Manuel Sánchez Pontón, quien hizo un recuento de la problemática que enfrentan los periodistas en México, y del reto que tienen para despertar al pueblo, toco el turno al director del Diario Transición, quien dirigió el siguiente mensaje:
Distinguidos representantes de nuestras autoridades estatales y municipales.
Compañeros y amigos periodistas.
Señoras y señores.
Muy estimado maestro Fernando Ramírez Osorio:
Nuestra querida Puebla es la casa de todos, preservarla, cuidarla, mantenerla limpia, segura y funcional es tarea de todos los que la habitamos, no sólo del gobierno, si bien en él recae la responsabilidad de coordinar la acción de todos.
En esta tarea, hay quienes dedican un trienio, otros un sexenio, unos más, algo más, siempre desde las alturas, con escasa, nula o regular trascendencia; otros dedican toda una vida, siempre en su condición ciudadana. A final de cuentas, es la acción de estos últimos la que determina el sentido ulterior de la historia de nuestra ciudad.
Fernando Ramírez Osorio, es un ciudadano de estos, es en algún sentido como el que celoso cuida que su casa, nuestra casa, sea además de habitable, hermosa, ordenada, limpia y señorial.
Cuando Fernando Ramírez Osorio, asumió la presidencia del Comité Defensor del Patrimonio Cultural de Puebla, asociación civil, sabía perfectamente lo que defendía, porque lo conoció y lo ha amado toda su vida, hasta el punto de contemplarlo y plasmarlo con su lápiz, su pluma y su pincel, punto por punto, raya tras raya, hasta lograr esa textura, ese contraste, ese volumen, esa luz que hace saltar a las figuras, a los inmuebles y a las personas del papel en el que están dibujados.
Cuando FRO asumió esta responsabilidad, ya había caminado todas las calles de la ciudad, no le faltaba ninguna, ya conocía lo que estaba edificado, no sólo en sus fachadas, sino en los espléndidos interiores de las casonas coloniales, de aquellas vecindades olvidadas, malqueridas y abandonadas, por quienes a pesar de ser sus dueños no sabían ni el valor de lo que les pertenecía.
La lucha de Ramírez Osorio en principio fue contra la ignorancia, luego contra la displicencia, más tarde contra la usura, la ambición mezquina, la prepotencia y el individualismo a ultranza. Nunca se cansó, no se ha cansado, aún cuando ha logrado sus objetivos, Puebla ha sido reconocida como Patrimonio Cultural de la Humanidad, ya no solo es de nosotros los poblanos es de todos los seres humanos, lo que nos obliga a ser más hospitalarios, cosmopolitas y abiertos a los cambios que la modernidad impone.
Por eso y tan sólo por eso, se haría merecedor al justo homenaje de reconocimiento que hoy le hacemos patente; pero no sólo por eso, porque don FRO, y permítame anteponerle el don a su nombre porque se aplica a la perfección es, ciertamente FRO de origen noble, no el sentido clasista de la palabra, sino en el significado de generosidad que este concepto implica. FRO es consustancialmente un artista de la pintura, de la escultura, del grabado y el muralismo. Vasta obra que es digno testimonio de incesante creatividad.
Nada podríamos agregar con palabras al bello mensaje que nos trasmite lo que él ha hecho con sus manos, benditas manos que nos dejan a los poblanos y a todos los seres humanos, la oportunidad de admirar nuestra propia casa con los valores que ella encierra.
RO es también un baluarte de la Libertad de Expresión, motivo por el cual ha sido víctima de la intolerancia y el autoritarismo. Muchas veces sufrió en carne propia lo que representa la incomprensión y el despotismo, pero nunca se arredró, ni se humilló, ni se confrontó, simplemente continuó con su trabajo realmente trascendente.
Por ello, a nombre del Grupo de Periodistas de Puebla, queremos pedir en esta mañana a nuestras autoridades municipales que dentro de los proyectos de remodelación de la zona en la que está enclavada esta Plaza de la Libre Expresión, se incluya la colocación de diversas obras del maestro FRO que requieren un sitio digno para que todos los habitantes permanentes u ocasionales de esta ciudad, las podamos apreciar a cualquier hora. Hablo del mural que se retiró del museo de historia natural, hablo de los grabados de Benito Juárez e Ignacio Zaragoza, hablo de los dibujos de patios coloniales ilustrados con singular maestría, hablo de los grabados del carnaval de Huejotzingo, hablo, en suma, de todo lo que no debe estar oculto a los ojos de quienes gozan del arte plástico, de quienes visualmente saben disfrutar de la belleza de nuestro entorno. De esta manera, el homenaje que hoy tributamos a FRO, no se quedaría en la retórica o el mero acto ceremonial para rendirle pleitesía, sino que habría una huella tangible del reconocimiento que le tributamos al maestro.
Pido, con el debido respeto a todos los aquí presentes, se sumen a esta petición y la suscriban con su firma, porque no es el caso pregonar que es iniciativa de un grupo de periodistas, sino que es la justa petición que formulan ciudadanos conscientes de todas las ocupaciones, sin distinciones de ninguna índole, simplemente por ser poblanos, por nacimiento, por adopción o por vocación, porque amar a Puebla implica agradecer y reconocer a quien la ha hecho bella, y de éste mérito, una muy significativa porción le corresponde a FRO.
A usted mi querido e ínclito maestro FRO, le pido que acepte este sencillo pero muy significativo homenaje a usted y todo lo que ha hecho por nuestra propia casa.
Gracias, muchas gracias.
En la ceremonia fungieron como maestros de ceremonias, los periodistas Gerardo Sánchez Martínez y Alberto Mendoza Ruiz.
Al evento acudió una centena de invitados entre periodistas y trabajadores del arte y la cultura, quienes por la tarde compartieron el pan y la sal en alegre convivencia, donde se hizo un reconocimiento a las personas que de alguna manera han colaborado con el ejercicio de la libertad de prensa.