29 de noviembre de 2006

Se va la chachalaca, lo releva el pelele

Luego de incumplir todas sus promesas de campaña, archimillonario, concluye el gobierno más nefasto de la historia de México
Para sucederlo, nervioso, se encuentra el espurio «presidente electo» custodiado por un dispositivo militar nunca antes visto

Federico Chilián Orduña
El mandilón marido de la señora Martha, el vástago de extranjeros, la chachalaca mayor, el traidor a la Patria y a la democracia, ese hijo de la chingada que dice llamarse Vicente Fox Quesada, por fin dejará el puesto de presidente de la República Mexicana, después de haberla saqueado, empobrecido más todavía, dividido y confrontado, para heredarle el cargo a otro delincuente peor que él, el aboganster Felipe de Jesús Calderón e Hinojosa, el terrible FECAL, quien desde antes de su toma de usurpación, ya ordenó masacrar a cientos de oaxaqueños, para que el resto de los mexicanos sepamos en qué consiste su «mano firme y pasión por México».
El consorte de la señora Sahagún prometió un crecimiento económico del 7% anual, en el balance del sexenio en promedio el crecimiento fue nulo; prometió la creación de un millón de empleos cada año, en realidad el número de derechohabientes del IMSS disminuyó, y tuvieron que emigrar a los Estados Unidos más de 4 millones de mexicanos en busca de las oportunidades que aquí no tuvieron; prometió resolver el conflicto de Chiapas en menos de 15 minutos, pero nunca hubo ni siquiera un saludo entre su representante Luís H. Álvarez y el EZLN, pero eso sí, don Luís cobró más de 150 mil pesos mensuales por esa «chambita»; prometió la chachalaca sacar al PRI de Los Pinos, y sus principales colaboradores fueron del PRI y además rabiosos salinistas, Francisco Gil Díaz, en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y Guillermo Ortiz Martínez, en el Banco de México; prometió acabar con el régimen presidencialista, y utilizó a todas las instituciones del poder ejecutivo, el legislativo y el judicial, para desaforar como jefe de gobierno a Andrés Manuel López Obrador, a quien finalmente le robó la presidencia de la República, para instalar a quien podría garantizarle impunidad, el pelele FECAL.
El «pichoncito» de la señora Martha se ufana de dejar al país en paz, con estabilidad y en franco ascenso; en realidad hay guerra en varios estados, en cualquier momento FECAL se puede caer y se acentuó la caída de la economía mexicana, pese que el precio del petróleo aumentó como nunca antes, y las remesas enviadas por los mexicanos residentes en el extranjero, también se incrementaron como nunca antes, pero nada de estos ingresos le sirvieron a la chachalaca para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos, él se dedicó a aumentar los privilegios de sus amigos; por eso desde esta tribuna, a él y a su sucesor les digo con toda honestidad y respeto que se vayan mucho a la chingada, antes que la historia los juzgue, en ejercicio de mis derechos constitucionales, yo ya lo hice.