28 de enero de 2007

FECAL hizo el ridículo en Davos, Suiza

· Pugnó por la reinstalación del ALCA en lo que ni el secretario de la OEA estuvo de acuerdo
· El presidente de Brasil, Lula da Silva, le hizo notar sus aberrantes posiciones
Federico Chilián Orduña
Lo que dijo el espurio presidente Felipe Calderón (FECAL) en el Foro Económico Mundial efectuado en Davos, Suiza, puso en evidencia ante la comunidad internacional que el mandatario mexicano es un simple pelele de Washington y del capital transnacional a los que se acoge desesperadamente como naufrago en medio del océano.
La apología que hizo de la economía de libre mercado y su opinión respecto a las expropiaciones que los presidentes sudamericanos están llevando cabo (Evo Morales en Bolivia, Hugo Chávez en Venezuela, Nestor Kischner en Argentina, Michaell Bachelett en Chile, Tabaré Vázquez en Uruguay, Rafael Correa en Ecuador, Daniel Ortega en Nicaragua y Alán García en Perú) aunada a su postura de que hay que revivir el Acuerdo de Libre Comercio de las América (ALCA) y que “lo que está en juego en las democracias latinoamericanas no es si son de izquierda o de derecha, sino, si miran al pasado o al futuro, y que -en México- los ciudadanos que lo eligieron, votaron por él, porque representaba el futuro”, hizo reír a la concurrencia que se aguantó las ganas de lanzarle sus vasos con liquido o cualquier proyectil para manifestarle su reprobación.
Quien se encargó de poner en su lugar a FECAL fue el presidente brasileño Luís Inacio Lula da Silva quien le aclaró que en Latinoamérica nadie está planteando la desaparición de la economía de mercado sino su regulación para que los más desprotegidos no sean avasallados por las grandes corporaciones, que el crecimiento económico no se genere a expensas del desarrollo social y la destrucción del ambiente ecológico.
Lula fue más allá al resaltar que seguir con las mismas políticas que han empobrecido a los pueblos en los últimos 30 años, significa aferrarse al pasado, y que el futuro tienen que construirse sobre nuevas bases de cooperación entre los pueblos y en ese tenor el ALCA (que tanto apoya FECAL) representa el pasado, que beneficia sólo a Estados Unidos y no a los pueblos de Latinoamérica.
Y todavía más, Lula destacó que Hugo Chávez ha sido electo y reelecto en dos ocasiones y que las tres veces lo ha sido de manera ejemplarmente democrática, venciendo a quienes mediante golpe de estado quisieron eliminarlo. La defensa que Lula hizo de Chávez, fue un severo revés para el terrible FECAL que a estas alturas ya quería ir a expulsar la materia que indica su nombre.
Con el rostro enrojecido, la sonrisa nerviosa, visiblemente descompuesto, el terrible FECAL se esforzaba en dar pie con bola sin atinar más que hacerla de comerciante en la vía pública, ofertando los recursos, principalmente energéticos, con los que cuenta México, para que los grandes capitalistas vinieran a multiplicar sus ganancias, él les garantizaría que las inconformidades obreras y populares estarían controladas con su mano firme y su pasión por México S.A.
Entre tanto a las afueras del recinto donde se realizaba el Foro, ciudadanos de diversos países en múltiples idiomas le recordaban a su progenitora, le gritaban ¡espurio, pelele, ratero! y le exigían que cesara la represión en Oaxaca, en Guerrero, en Chiapas y en todo el país, a lo cual prestó oídos sordos y sólo sus ayudantes alcanzaron a decirle que algunos extranjeros le daban la bienvenida con la mano en alto, el dedo medio levantado y los demás dedos cerrados.